(Por LA GACETA) Cada vez que se toca el tema todos responden de la misma manera: "en Atlético no hay diferencias, todos somos iguales". Las declaraciones son de cassette, pero tienen mucho de ciertas; en los "decanos" es difícil notar diferencias. Todos valen por igual, pese a que cuando llega el fin de semana el técnico debe elegir 18 futbolistas de los más de 30 que tiene a disposición. Lo positivo, como dice Enrique Hrabina, es que cuenta con un gran grupo de profesionales, y cada vez se le hace más complicado dejar a uno u otro afuera. Y está bien.Uno de los que pintaba para ganarse un lugar indiscutido al principio de la temporada era Julio Buffarini. Entró derechito en el corazón del hincha por la garra que pone para pelear por cada pelota. "Buffa" está a mil, a pesar de las circunstancias. "Es duro, pero siempre tuve que luchar y no voy a dejar de hacerlo ahora. Soy consciente de que estoy empezando mi carrera profesional, e integrar un plantel tan competitivo como el que formó Atlético me favorece. Puedo sumar experiencia y mejorar", expresó el carrilero por derecha.
De paso, el cordobés se encargó de cerrar el tema celos: "estamos bárbaro, muy unidos. Este es un grupo humano excelente y, creo, esa es la base necesaria e imprescindible para pelear al 100% por el objetivo que nos propusimos al inicio del torneo con los chicos". ¿De qué habla? De la ilusión albiceleste de volver a la máxima categoría, por supuesto.
A días del partido del año para los tucumanos, "Buffa" se ilusiona con ganarse un lugar entre los hombres convocados por el entrenador. "La motivación siempre está -recalcó-. Ni hablar cuando se trata de un clásico, que es algo muy especial, sobre todo en una ciudad futbolera como esta".
